Flor de Lava: melodías de sanación y fuerza femenina
Laura Camila Ramos Conde
El grupo musical Flor de Lava tuvo un inicio que podría considerarse como el resultado de una serie de casualidades afortunadas. Todo comenzó hace dos años, cuando una artista colombiana invitó a las futuras integrantes a participar en una canción suya. Aunque ya se conocían de lejos y se reconocían mutuamente en la escena musical, nunca habían compartido tanto tiempo juntas hasta aquel primer ensayo.
Fue en ese momento cuando surgió un clic instantáneo y una conexión que nadie podía entender del todo, pero que se sentía perfectamente natural y prometedora entre María McCausland,Brina Quoya, Natalia Medina, Paula van Hissenhoven, Pilar Cabrera y Sabi Satizábal.
Desde ese ensayo inicial, todo fue como una ola que las fue llevando a explorar nuevas posibilidades juntas. Al principio, la idea era seguir colaborando y tocando, pero pronto surgió la pregunta: “¿Y ahora qué hacemos?”
La respuesta fue orgánica: decidieron hacer música juntas, ya que todas tenían sus proyectos solistas y tocaban diferentes instrumentos. Esta versatilidad instrumental y creativa fue la semilla que permitió la formación de una banda que integraría las habilidades y lo talentos individuales de cada miembro.
La evolución del proyecto
Sin darse cuenta del todo, estas ganas de seguir compartiendo y haciendo música juntas fueron creciendo. Lo que empezó como una colaboración ocasional se transformó en un proyecto que ha llegado a muchos corazones y rincones del mundo. Después de un tiempo tocando las canciones de cada una, tomaron la decisión de componer un disco, creado específicamente para la banda. Esta decisión marcó un hito en la evolución de Flor de Lava, consolidándolas como una banda con canciones propias y un estilo único.
Una de las particularidades de Flor de Lava es la diversidad de sus integrantes, tanto en términos de orígenes como de habilidades musicales. Este aspecto ha enriquecido su música y les ha permitido encontrar un estilo propio que refleja las influencias y talentos de todas.
“Creo que una de las cosas que funciona para que trabajemos juntas es que cada una está súper comprometida con su crecimiento personal. Cada una es súper responsable de sus procesos, heridas y miedos, entonces ha sido mucho más amable y amoroso crear este proyecto juntas, Cuando componemos no ha sido lo más sencillo, pero ha sido posible dejar el ego a un lado y estar en función a la canción, a la música y a lo que se necesite sonoramente”, asegura Maria McCausaland.
La búsqueda constante y el proceso creativo
En su búsqueda constante de componer juntas y compartir ideas, Flor de Lava ha construido un universo sonoro único. Cada canción es el resultado de una fusión de los gustos musicales y las experiencias de vida de sus integrantes. Esta exploración constante de sonidos y temáticas les ha permitido crear una identidad musical que resuena profundamente con sus oyentes.
Una canción que destaca en este proceso es ‘El velo se cayó’, lanzada en marzo de este año. La creación de esta canción fue una experiencia casi mágica y orgánica. Aunque no recuerdan con detalle cómo surgió exactamente, sí saben que nació de un campamento de tres días en Villa de Leyva, donde compartieron intensamente sus vivencias y emociones. La canción se ha convertido en un himno, tocando a mujeres de diferentes generaciones e incluso la canción se viralizó en redes sociales por su poderoso mensaje.
El impacto de su música
La respuesta del público, especialmente de otras mujeres, ha sido abrumadora. “El velo se cayó” no solo se ha viralizado, sino que también ha tocado a muchas mujeres que encuentran en la canción un mensaje de empoderamiento y autenticidad. Ver a mujeres de todas las edades cantando y bailando sus canciones ha sido una experiencia profundamente conmovedora para las integrantes de Flor de Lava.
Ser un grupo de mujeres en una industria predominantemente masculina ha presentado sus propios desafíos. Sin embargo, estas dificultades también han sido una fuente de unión para la banda. Compartir experiencias y apoyarse mutuamente ha sido crucial para enfrentar los obstáculos y seguir adelante. El hecho de que cada una tuviera un proyecto solista antes de formar la banda les ha dado una comprensión profunda de las dificultades y la importancia de la colaboración.
“Surgió una necesidad nuestra de conectarnos, de llegar más lejos, de colaborar, de acompañarnos e impulsarnos al principio. Estar cantando las canciones de todas, de ir a cada uno de los conciertos de las otras, de subirnos a cantar juntas en cualquier escenario a simplemente compartir esa experiencia y que no se sintiera tan solitaria, eso ha sido lo que nos ha atraído a dónde estamos”, indicó Brina.
Lo que viene para Flor de Lava
Flor de Lava está a punto de lanzar su primer disco, con ‘El velo se cayó` como su primer sencillo oficial. La canción será acompañada de un videoclip grabado en Villa de Leyva, un lugar especial para la banda. Este disco promete ser una colección de himnos que hablan de la experiencia de ser mujer en este siglo, tocando temas de empoderamiento y autenticidad. Además, otro de sus sencillos será lanzado el próximo viernes dos de agosto.
La banda se prepara para llevar su música a nuevos horizontes, incluyendo conciertos en Europa, Argentina, Chile y Uruguay. Flor de Lava sigue vibrando alto y conectando profundamente con su público, esperando que su música siga tocando corazones alrededor del mundo.