Sesquilé, un destino de lujo, gastronomía y naturaleza

Revista Diners
A poco más de una hora de Bogotá, por la Carretera 55, se revela un rincón histórico de Colombia que parece tejido con hilos de neblina y silencios antiguos: Sesquilé. Un municipio que en lengua muisca significa boquerón de la arroyada o agua caliente, y que está nominado por parte de Colombia en el concurso mundial Best Tourism Villages, un reconocimiento que premia a los pueblos que conservan su patrimonio cultural y natural.
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El viaje desde Bogotá es sencillo tanto en moto como en carro. En este último puede durar 1 hora y 5 minutos, en los que pasará por los peajes dos peajes Andes y El Roble. El primero, al salir de Bogotá, cuesta $12.700; el segundo, al llegar a Sesquilé, $11.600, según las últimas tarifas de 2025.
Al llegar se encontrará con un municipio en el que se puede respirar la época precolombina, esa de cuando los muiscas habitaban estas tierras y adoraban el agua como fuente de vida y sabiduría. Aunque se fundó oficialmente el 21 de marzo de 1537 por Gonzalo Jiménez de Quesada, también se habla de una segunda fundación en 1600 por el Oidor Luis Enríquez.
Sesquilé, con una extensión de 141 kilómetros cuadrados y una altitud de 2.595 metros sobre el nivel del mar, limita al sur con Guatavita, al norte con Chocontá y Suesca, al oriente con Machetá y al occidente con Gachancipá.
¿Qué hacer en Sesquilé?
Uno de sus grandes atractivos es el Embalse de Tominé, compartido con Guatavita. Este espejo de agua, que provee energía y abastecimiento a Bogotá y municipios vecinos, se ha convertido en un escenario perfecto para el senderismo, cabalgatas, camping y deportes acuáticos como vela, kayak y esquí.
Para los amantes de la montaña, el Cerro Las Tres Viejas lo espera con su majestuosidad. Un lugar ideal para senderismo y camping, donde el cuerpo se fortalece y el espíritu se aquieta.
Ahora si lo que busca es conectar con la historia le contamos que en 1999 surgió en Sesquilé la comunidad indígena conocida como Los Hijos del Maíz, reconocida oficialmente como Comunidad Mhuysqa gracias a la iniciativa de Carlos Mamanché Gonzales. Inspirados en el pensamiento ancestral, trabajan por recuperar la memoria histórica y cultural de sus antepasados.
Su corazón late en la base del cerro Chibchacum, donde construyeron el Cusmuy, la casa ceremonial del agua. Aquí se celebran rituales, se camina el sendero del agua y se revive la relación profunda con la naturaleza. Quienes deseen vivir esta experiencia pueden reservar al WhatsApp 311 224 7770 y ser parte de ceremonias, caminatas y círculos de palabra alrededor del fuego.
Para comer y tomar en Sesquilé
Después de una jornada de conexión y aventura, Sesquilé invita a saborear su gastronomía, donde puede empezar con Francachela, un gastrobar que combina pizza, música en vivo y un ambiente familiar. Su pizza de frutos del mar es especialmente recomendada. Precio promedio por persona: $50.000 a $60.000.
Para los amantes de la carne, Parrilla Sol y Luna ofrece parrilladas, bandejas paisas y amasijos, con precios entre $30.000 y $40.000. Su ambiente cómodo y decoración cuidada convierten el almuerzo en una pausa merecida.
Para dormir y descansar en Sesquilé
El hospedaje en Sesquilé es de las mejoras cosas que existen en el municipio. Empezamos con el Hotel Casa Manoa Sesquilé, que ofrece habitaciones desde $349.000, con planes especiales como el Plan Ancestral, que incluye hospedaje en habitación doble, desayunos, bebidas calientes ilimitadas, recorrido por la calle de los murales y visita guiada al resguardo indígena Muisca. Una experiencia que entrelaza comodidad y espiritualidad.
En esta línea también se encuentra el Hotel Pueblo Dorado, desde $222.000, ofrece habitaciones con vistas al jardín, WiFi y desayuno vegetariano. Su ubicación cercana al centro y al Parque Agroecológico Macanu lo hace práctico para explorar.
Por último, el Hotel Las Tres Viejas, desde $193.500, se destaca por su ambiente artístico, habitaciones confortables y atención amable. Su cercanía al Parque Jaime Duque y la Plaza Central de Sesquilé lo convierte en un refugio perfecto para quienes buscan tranquilidad y aire puro.
Un pueblo para tener en cuenta
Elegido entre los nominados a Best Tourism Villages, Sesquilé se presenta como un lugar con historia donde se pueden ver las raíces de Colombia. Así que, cuando el bullicio de la ciudad pese en los hombros y el alma pida un respiro, Sesquilé lo espera con los brazos abiertos.